El entrenador de la selección uruguaya de fútbol, Marcelo Bielsa, decidió esperar hasta finalizar el último partido de los jugadores reservados para anunciar los convocados, buscando evitar desilusiones públicas entre los jugadores reservados.

Uruguay debutará el 8 de setiembre enfrentando a Chile en el Estadio Centenario, para luego viajar a Quito el 12 de setiembre y medirse contra Ecuador.

A pesar de las expectativas de que la lista sería revelada en una conferencia de prensa programada por la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) este sábado, Bielsa optó por demorar la confirmación hasta el Lunes.

La razón detrás de esta postergación radica en la precaución de Bielsa por esperar a que finalice la jornada dominical de partidos en las ligas internacionales, donde la mayoría de los jugadores uruguayos compiten, tanto en Europa como en Sudamérica. El objetivo es evitar posibles cambios de última hora debido a imprevistos, como lesiones o problemas logísticos, y asegurarse de que los nombres anunciados sean los que finalmente estén disponibles.

Bielsa explicó su enfoque en una conferencia de prensa: «Reservé a 34 jugadores y convocaré después de que terminen los partidos de mañana [domingo] a los que decida, una cifra que será menor». El entrenador subrayó su deseo de evitar que los jugadores se sientan desilusionados públicamente si son excluidos de la convocatoria.

«Cuando un reservado no es convocado, sufre una desilusión, y cuando es pública, esa desilusión se amplifica. Quiero evitarlo, lo hice durante toda mi carrera», afirmó Bielsa. En resumen, el técnico argentino ha optado por una aproximación diferente en la comunicación de las convocatorias, buscando proteger la emocionalidad de sus jugadores hasta el último momento.