El azulgrana se impuso 4-3 desde los once pasos luego de un 0-0 muy disputado en el Casto Martínez Laguarda. Ahora enfrentará a Campana en la semifinal de la temporada.

San Lorenzo y Central volvieron a encontrarse para definir el Torneo Clausura, luego del 2-2 registrado en la ida. En un Casto Martínez Laguarda colmado, ambos protagonizaron un duelo cerrado, parejo y con escasas situaciones de gol que terminó 0-0 y obligó a resolver el título desde el punto penal.

El primer tiempo tuvo imprecisiones de lado y lado. Central pudo abrir el marcador apenas a los cinco minutos, cuando Joaquín Cabrera dejó corto un pase hacia su arquero y Nahuel Fagián quedó mano a mano, pero Francisco Paredes respondió con una atajada determinante. Después de ese sobresalto, el encuentro entró en una tónica trabada, sin claridad en ofensiva y con escaso trabajo para los goleros.

En el complemento, el partido ganó en intensidad. San Lorenzo avisó primero con un remate de Iván Reyes que se fue alto, mientras que Central respondió con un cabezazo de Facundo Rodríguez tras un centro de Eduardo Hernández. El local tuvo dos de las más claras: un mano a mano de Leandro Elizeche que rozó el palo y un remate de Julio Rodríguez que se fue por arriba tras una buena acción individual.

La expulsión de Nicolás Rebollo sobre los 30 minutos dejó a Central con diez y dio impulso al azulgrana, que llegó a reclamar penal por una caída de Alonso y tuvo una última oportunidad en los descuentos con un cabezazo de Joaquín Olivera bien contenido por Álvarez. El 0-0 selló un partido intenso, pero sin quiebres, y envió la definición a los penales.

La tanda de penales

Central comenzó mejor: Álvarez contuvo el primer remate de Vincent Hórnes. Luego, ambos equipos acertaron hasta que Nahuel Fagián estrelló su remate en el palo derecho. Joaquín Olivera anotó el quinto para el azulgrana y dejó la presión en manos de Maximiliano Britos, que envió su remate por encima del horizontal. San Lorenzo ganó 4-3 y se quedó con el título.